Gabriel Díaz Rodríguez
Mercedes no ha arrancado la temporada 2022 arriba con Ferrari y Red Bull siendo protagonistas. Como estaba previsto, los alemanes están en zona de nadie en la parrilla. Y este año, con límite de presupuesto y un nuevo reglamento al cual adaptar el coche, ha hecho que las mejoras en Mercedes se tarden.
Aunque los resultados logrados en las dos primeras carreras del año no han sido malos, siendo Mercedes, es terrible esta situación. Se ha confirmado que para este GP de Australia tampoco llevarán mejoras para el W13. Esas mejoras van en solucionar el problema del ‘porpoising’, que les hace perder tiempo y velocidad en las rectas.
Otras de sus mejoras para Imola, anteriormente el GP de San Marino, va a ser que el fondo plano esté lo más pegado posible a la pista (efecto suelo) sin perder nada de carga aerodinámica.
Mercedes, está 2° en el campeonato de constructores, un punto detrás del equipo de las bebidas energéticas, Red Bull. Recordemos que, en Bahrein, ambos coches del equipo estaban 2° y 4° antes del doble abandono de sus monoplazas, a pocas vueltas del final del Gran Premio del país medioriental.
El panorama previsto para Australia, muy posiblemente, apuntará a que los alemanes estén como en Bahrein y Jeddah, en tierra de nadie.
Otra pregunta para este GP es si Mercedes podrá aguantar la 2° en constructores ante Red Bull antes de Imola, donde llegaran sus mejoras. ¿Será que las mejoras previstas para San Marino ayudarán mejorar el ‘pobre’ rendimiento de la flechas plateadas o, de lo contrario, seguirán estancados como van?