Juan Pablo Oclassen
Los problemas de orden público no cesan en el fútbol colombiano. Aún sigue retumbando ese verso de que las hinchadas cambiarían después de la cuarentena por el covid-19, que entendería lo que es pasar tanto tiempo sin asistir a los escenarios y volverían con ganas de vivir el folclor del deporte en paz. Sin embargo, en los últimos tres años este panorama se agudizó quedando en evidencia durante la última semana de Liga BetPlay 2023-1.
En menos de tres días, hubo reacciones violentas en dos escenarios importantes del país. Dejando varias personas heridas, tanto agentes del ESMAD como barristas. El primer hecho se presentó en el Atanasio Girardot el pasado domingo 16 de abril, cuando el sector de la hinchada de Atlético Nacional, denominado como Los Del Sur, ocasionó desmanes e impidió la realización del clásico ante América de Cali. No se pudo jugar y aplazaron el encuentro para el próximo jueves 4 de mayo.
Todo tuvo que ver con el levantamiento de las directivas del club antioqueño de los apoyos económicos, que se concertaban en una mesa de seguridad en conjunto con la Alcaldía de Medellín, que eran destinados a la logística de la barra. Esto ocasionó un rifirrafe entre las partes que terminó en violencia y Nacional catalogó lo sucedido como un método de extorsión o una «vacuna».
Capitanes del fútbol colombiano alzaron la voz
El martes 18 de abril, con motivos diferentes, la barra Holocausto Norte de Once Caldas invadió el Palogrande al minuto 89 del partido ante Alianza Petrolera, juego que perdía el local 1-2. Los manizalitas están pasando afugias con el descenso y eso motivó a algunos mal llamados hinchas a tomar las vías de la violencia. Algunos jugadores alcanzaron a recibir puños y patadas de los desadaptados, y el juez tuvo que dar por terminado el encuentro.
A raíz de estos hechos tan repetitivos, unos que el año pasado también ocurrieron en un partido entre Cortuluá y el Deportivo Cali, los capitanes del fútbol colombiano se reunieron. A través de Acolfutpro, ente que agremia a los jugadores del FPC, levantaron su voz pidiendo seguridad para todos los futbolistas del país. “Pedimos a las autoridades que se refuercen las medidas de seguridad para los partidos calificados de alto riesgo», señalaron en el comunicado.