Juan Camilo Rodríguez
París Saint-Germain se llevó un golpe en la ida de los octavos de final ante Bayern Múnich. El equipo parisino, con sus estrellas, está obligado a levantar ‘la Orejona’, pero con el (0-1) empiezan en desventaja. Esto lo sabe Sergio Ramos, que dejó en evidencia su frustración al final del partido.
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Después de que Bayern Munich se llevara el encuentro por la mínima gracias a un gol de Kingsley Coman. Los protagonistas se dirigían a los vestuarios y se produjo una escena reprochable. Uno de los fotógrafos oficiales terminó pagando los platos rotos.
Sergio Ramos, que fue uno de los mejores jugadores del París Saint Germain, se topó con dos fotógrafos y no le gustó que invadieron su espacio personal. El segundo lo tropezó y eso hizo que el exjugador del Real Madrid reaccionara de la peor manera. De manera violenta empujó al fotógrafo y le dijo algunas palabras que no se alcanzan a descifrar.
El empujón de Sergio Ramos
Después de eso, Sergio Ramos se dirigió a la zona mixta y habló con los distintos medios de comunicación. Ahí se le vio más tranquilo y charló con los periodistas sin ningún problema.
El defensor centra es uno de los más experimentados del plantel. Asumió ese rol y fue lo más destacado en un equipo que no ofreció su mejor versión. Al final dijo que es necesario que tengan la tranquilidad para afrontar el partido de vuelta y lograr remontarle al Bayern Múnich en Alemania.
El partido de vuelta será en el mes de marzo en el Allianz Arena. Se espera que para ese encuentro ya Kylian Mbappé pueda estar desde el inicio. En los 20 minutos que jugó se demostró una vez más lo importante que es para ellos, por lo que eleva las esperanzas de los hinchas franceses.