El balance de Wilmar Roldán en una polémica final de Copa Libertadores

La final de la Copa Libertadores tuvo como juez central a Wilmar Roldán, demostrando porque es considerado el mejor del continente.

Por: Andrés Pesca, periodista de La10Andrés Pesca
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Wilmar Roldán juez central de la final de la Copa Libertadores//Foto: Edición La 10

Había mucha expectativa en torno a la final de la Copa Libertadores entre Boca Junior y Fluminense, las miradas estaban puestas en el juez central Wilmar Roldán.

Río de Janeiro se vistió de fiesta para albergar el partido más importante del fútbol sudamericano en donde se enfrentaban un gigante del continente como lo es Boca Juniors con Fluminense.

El peso de semejante compromiso recaía en el silbato colombiano, ya que siempre será bravo pitar una final de la Libertadores y más cuándo se enfrentaba un equipo argentino con uno brasileño.

Debido a la gran rivalidad que hay entre estos dos países, por lo cual se sabía que iba a ser un encuentro plagado de jugadas “polémicas” y de reclamos por parte de los protagonistas en la más mínima acción.

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El compromiso empezó parejo sin un claro dominador, como era de esperarse los jugadores empezaron a protestar la más mínima acción, Wilmar Roldán no se dejó llevar y manejó los tiempos del compromiso.

La cuestión es que las acciones polémicas no se hicieron esperar, porque el partido estuvo friccionado y en donde ambos equipos se jugaban demasiado era de esperarse, pero el árbitro estuvo a la altura.

Wilmar Roldán actuó bien en las expulsiones

El juez tuvo que tomar dos drásticas decisiones, la primera de ellas sacarle la segunda amarilla a Kennedy por la celebración en el gol suponiendo la expulsión y así lo hizo.

Después al minuto 105 +5 hubo un tumulto en el área de Fluminense, los jugadores de Boca Juniors pedían penal, el cual el central no dio correctamente y en ese conato su compatriota Frank Fabra golpea a un jugador rival, el VAR lo llamó y expulsó al defensor.

Wilmar Roldán pasó la prueba, pero no al 100%

Pese a estar a la altura de lo que fue el compromiso, hubo una acción en las cual el silbato podría haber actuado mejor, Valentini le pegó un cabezazo a Ganso que lo hizo caer al suelo.

Por lo cual los brasileños le reclamaron al juez la tarjeta, lo cual este omitió y en su defensa desde el VAR tampoco lo llamaron para corroborar si hubo error en esa jugada.