Luis Lora
El comienzo de la nueva temporada para el América de Cali no ha sido el esperado. Ya que después de 5 jornadas disputadas en la Liga BetPlay, el equipo «Escarlata» todavía no ha logrado encontrar su mejor ritmo. A pesar de tener un partido pendiente, su cosecha de 5 puntos hasta el momento es bastante modesta. Especialmente considerando la calidad de jugadores que integran su plantilla. Durante el último mercado de fichajes, la afición del América se ilusionó con las adquisiciones de nombres destacados como Edwin Cardona, Jader Quiñones, Marcos Mina y Joyce Ossa, entre otros.
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Sin embargo, existe un sector de la hinchada que ha mantenido cierto escepticismo en relación con el entrenador Lucas González. A pesar de que este joven entrenador bogotano se destacó en el semestre anterior, aún no ha logrado implementar su estilo de juego en este influyente club del Fútbol Profesional Colombiano. La derrota del equipo vallecaucano ante el Medellín el pasado domingo solo aumentó las críticas. Ahora, un periodista ha insinuado que podría haber tensiones internas en el equipo.
Las declaraciones que confirman relación rota al interior de América de Cali
El periodista Javier Hernández Bonnet, en una entrevista en Blu Radio este lunes tocó un tema importante. Aquí comentó sobre una supuesta ruptura en la relación entre el técnico y el jugador Carlos Darwin Quintero. Según sus palabras, «Sé que está rota la relación con Carlos Darwin Quintero, y ayer se demostró. Ayer lo sustituyó y no hizo buena cara. Pero bueno, digámoslo en buen juicio, que hay la resistencia natural de jugadores que inclusive pueden ser hasta mayores o muy cercanos en edad al técnico.» Hernández Bonnet también mencionó que en su etapa en Águilas Doradas, Quintero habría enfrentado una situación similar. Esto según comentarios de Fernando Salazar, el máximo accionista del club.
Esta situación se volvió evidente durante el partido contra Independiente Medellín, cuando a los 57 minutos el técnico Lucas González decidió sustituir a Carlos Darwin Quintero. La reacción del delantero fue notoria, ya que se dirigió de manera directa a los bancos y mostró señales de frustración, incluso golpeando una silla. Estas tensiones internas plantean interrogantes sobre la armonía dentro del equipo y cómo esto podría afectar el desempeño en el terreno de juego en los próximos encuentros.