Juan Pablo Oclassen
El próximo 17 mayo, Carlo Ancelotti solo tendrá un problema para enfrentar al Manchester City. Partirá de la premisa de cómo armar el 11 titular. Si bien, sus dirigidos no jugaron mal el martes en el Santiago Bernabéu. Quizás pecaron por perdonar mucho al conjunto de Pep Guardiola, pero dominaron el encuentro durante una gran porción de tiempo. Todo se destrabó debido al error de Eduardo Camavinga y su pase al centro del campo, que dejó descuadernado al Real Madrid.
Los merengues quieren otro bicampeonato de UEFA Champions League y no podrán flaquear en Etihad Stadium por la semifinal de vuelta. Guardiola sabe lo impredecible que puede ser la Casa Blanca, un equipo que puede habituarse a la perfección en todos los sistemas y que navega perfectamente en las condiciones de un partido. Sabe aguantar, sufrir, proponer y hasta remontar en circunstancias impensadas.
Este mismo equipo inglés lo vivió por esta misma instancia de campeonato el año anterior. Le tocó ver cómo le remontaba el juego un juvenil como Rodrygo Goes. Fue una locura en el Bernabéu hace un año. Pero en esta ocasión, la vuelta está 1-1 y se define en Inglaterra. Carlo Ancelotti encontró en la ausencia de Eder Militao a un hombre como Rüdiger que controló, como pocos, a Erling Haaland. No lo dejó hacer nada.
El principal problema para Carlo Ancelotti
El próximo miércoles, Militao podrá volver a la alineación titular porque limpió sus amarillas. Una carta que le genera más dudas que certezas al entrenador italiano. No puede sacar a Rüdiger, pero debe incluir al brasileño. ¿Quita a Camavinga del lateral izquierdo y manda a David Alaba sobre esa zona? Parece el cambio cantado, aunque hace mucho que el austriaco no actúa de manera adecuada sobre la banda, como central está mucho mejor afianzado.