Juan Pablo Oclassen
Se viene un momento crucial del FC Barcelona en la temporada. La final contra el Bayern de Múnich y la esperanza puesta en el Viktoria Plzen. Inter de Milán no puede ganar porque de inmediato el conjunto de Xavi Hernández se irá a la Europa League. Podrán hacer 10 puntos, pero con la derrota en Italia y el empate en Cataluña, el ítem de enfrentamiento directo quedó a favor de los nerazzurri.
Obviamente, el club culé debe ganar los partidos que le quedan por delante para poder meterse en la siguiente ronda. Cumpliendo, eso sí, la condición que se mencionó anteriormente. Todo un panorama complejo para un equipo que se reforzó pensando en la Champions League y le tocó menuda tarea difícil en un grupo muy competitivo. Tanto así que solo logró ganarle a los checos en casa.
Ahora, este miércoles recibirá a un elenco de Julian Nagelsmann imbatible en la UCL. Lleva 12 puntos de 12 posibles y ya está en la próxima ronda. Robert Lewandowski tendrá que aparecer por fin en un duelo complejo y tendrá que castigar al club que le dio reconocimiento en la última década. ¿Podrá conseguir el séptimo punto que le dé esperanza al blaugrana?
Los negocios del FC Barcelona
En medio de esta situación, desde Inglaterra surgió una noticia aislada que tiene que ver con la parte económica. Para nadie es un secreto todos los ajustes que tuvo que hacer Joan Laporta para cerrar fichajes esta temporada y poder inscribir jugadores. Lo frustrante que debe ser que el primer objetivo esté a punto de derrumbarse esta misma semana.
Todo se trata de Clément Lenglet. El zaguero central francés salió del equipo en el verano, a préstamo y sin opción de compra. Su situación podría cambiar en el Tottenham Hotspur y, pese a que no cuenta mucho para Antonio Conte, los londinenses piensan en adquirirlo en el verano que siguiente. 36 millones de euros pagó el Barcelona por él en el 2018 y ahora lo dejaría salir por 12 o 15 millones, una reducción significativa.