El jugador que más tiene enojada a la dirección del Barcelona

Los éxitos en el mercado para el Fútbol Club Barcelona se están convirtiendo en un problema porque el club aún no logra hacer que algunos jugadores se vayan.

Por: Juan Pablo Oclassen
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Barcelona

Todos quieren hacer parte de la renovación de Xavi Hernández. Hasta Ousmane Dembélé se quedó en el club, pese a su constante negativa para renovar el contrato. Tenía opción de llegar al Chelsea Football Club, pero aceptó bajarse el salario y quedar al menos dos temporadas más. Ahora bien, con todas las altas del blaugrana en este verano, lo más lógico es que salgan a lo sumo cuatro o cinco futbolistas. Hasta el momento, Clément Lenglet, Riqui Puig y Óscar Mingueza tomaron su propio rumbo. 

La decepción de la salida de Puig le pegó a más de un culé. Muchos hinchas acompañaron el crecimiento del volante en La Masía y su debut en el primer equipo. Los mismos que vieron cómo se desvaneció su oportunidad de brillar y terminó tomando la opción de marcharse a Los Ángeles, California, para actuar en LA Galaxy, equipo que tiene al ‘Chicharito’ Hernández. Mingueza al menos pudo irse al Celta de Vigo. 

Por su parte, quien le está ‘sacando canas verdes’ a la directiva del Barcelona, como se dice en Sudamérica cuando se trata de provocar enojo, es Martin Braithwaite. Lo quieren vender desde enero, pero no pasa por su cabeza salir del plantel. Según afirman desde Cataluña, el delantero que seguramente estará en Catar 2022 con Dinamarca confía plenamente en sus capacidades y cree que puede aportar algo dentro del terreno de juego. No se cansa de pedir oportunidades. 

El dolor de cabeza del FC Barcelona

Robert Lewandowski, Ferran Torres, Memphis Depay, Pierre Emerick Aubameyang, Raphinha, Ansu Fati, Dembélé y hasta Gavi, que ha jugado como extremo derecho, están por encima del ex Leganés. Cabe resaltar que él arribó al club en febrero del 2020 para reemplazar durante un mes a Luis Suárez, quien había sufrido una lesión. Extrañamente, Bartomeu pagó por su ficha 18 millones y le dio un contrato de cuatro años, a sabiendas de que solo era una rueda de auxilio. 

Normalmente, una cesión entra a regir en esos casos. Sin embargo, pensaron que podían venderlo de inmediato, pero él después no quiso ser vendido. Su rendimiento llegó a ser medianamente importante para el Barcelona de Koeman, pero se lesionó gravemente el 30 de agosto de 2021 y no volvió hasta el 20 de enero de este año.

Sigue con intenciones de jugar, más allá de que Xavi dejó claro que no es su prioridad aunque reconoció sus ganas y lucha por el lugar. No deja de causar curiosidad que no busque un club en el que pueda sumar minutos para llegar bien al Mundial.

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