Juan Pablo Oclassen
Deportivo Pereira estuvo a nada de repetir la gesta histórica de Atlético Nacional, ganarle a Boca Juniors en La Bombonera. El verde lo logró en el 2003, por la ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Ningún otro club colombiano ha podido conquistar ese mítico escenario y, hoy, el conjunto de Alejandro Restrepo perdió una chance única. Se le escapó el 0-1 de manera insólita y algunos piensan que hasta sospechosa.
Si este no es uno de los peores Boca de la historia, pues le pelea mano a mano. No por los resultados negativos, porque una mala racha la puede tener cualquier club. Pasa por la falta de talento, rebeldía y creatividad dentro del plantel. Solo un chico demostró tener la mística acostumbrada en el Xeneize, vista antes en jugadores como Maradona, Palermo, Riquelme, Schelotto, Delgado, Córdoba, entre otros. Y ese fue el ‘Colo’ Valentín Barco.
Pereira jugó unos buenos, a lo sumo, 80 minutos. Incluso, encontró el gol de la frustrada victoria al 76′, tras una buena recuperación de Arley Rodríguez sobre Alan Varela. El sanandresano ex Atlético Nacional filtró una buena pelota para la corrida de su hermano, Angelo, pero este no llegó, como sí lo hizo Jimer Fory para vencer a ‘Chiquito’ Romero. Un verdadero golazo; el séptimo tanto que le convierten equipos colombianos a Boca Juniors en toda la historia, en siete encuentros.
La polémica está sembrada tras el triunfo de Boca Juniors
Después del gol, el ‘Grande Matecaña’, vigente campeón del fútbol colombiano, se metió atrás y empezó a quemar tiempo. Alejandro Restrepo sacó a Johan Bocanegra, chico ex Junior y Huila, para darle ingreso a Larry Angulo, quien no hizo un buen encuentro. Luis Advincula empató el compromiso al 89 con un tanto impensado. El peruano le pegó con la menos hábil en el borde del área y se la clavó a Aldair Quintana en un lugar imposible.
Maicol Medina se fue expulsado al 90+1 en el conjunto colombiano, por doble amonestación. Pero antes el juez había añadido ocho minutos por la demora. Gracias a esa cantidad de tiempo de adición, Boca encontró el empuje en su jugador más joven y más pequeño en la cancha, el ya referenciado Valentín Barco. Nunca pudieron pasarlo por la izquierda, estuvo firme el chico de 18 años que debutaba por Copa Libertadores y, al minuto 100, le metió una brillante asistencia a Varela para darle el triunfo agónico y polémico para el local en La Bombonera. Por poco un debutante en la competición agudiza la crisis del azul y oro.