Adrián Barcasnegras
Brasil se dio ante Corea del Sur un auténtico festín. Golearon con alta contundencia a los asiáticos y los bailes en los festejos de los goles no faltaron. A Roy Keane esto no le gustó nada y los criticó, pero Raphinha y Tite salieron al cruce de las declaraciones.
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Keane, histórico exjugador del Manchester United que ahora se desempeña como analista deportivo, condenó el accionar del ‘Scratch’. Dijo al aire que es una falta de respeto con el rival que bailen de esa manera en cada uno de los goles y más involucrando al director técnico.
Keane no fue el único que se declaró en la vía contraria al sentir brasileño. Especialmente en Europa no gusta esa forma de celebrar, sin embargo, el elenco sudamericano parece estar determinado a continuar con su tradición.
El primero en saltar a defender el folclore brasileño fue Raphinha. El delantero del Fútbol Club Barcelona comentó que no es problema de ellos si a alguno no le gusta. Lo seguirán haciendo. “El problema es de quien no le guste, lo vamos a seguir haciendo”, declaró el ‘11’ de ‘la Verdeamarela’.
Otro que se refirió al tema fue nada menos que el timonel del plantel. Tite habló en conferencia de prensa sobre su participación en el festejo y aunque fue menos categórico que Raphinha, aclaró que no quisieron irrespetar a nadie. “Soy muy cuidadoso. Siempre están los malos que lo entenderán como una falta de respeto. Les dije a los jugadores que me escondieran un poco, sé lo de la visibilidad. No quería que tuviera otra interpretación que la alegría del gol”, dijo el estratega.
Lo de Brasil ya es una tradición que lleva muchos años. En este Mundial también lo vienen haciendo en cada partido y evidentemente no tienen intenciones de cambiarlo.