La historia de los momentos agónicos y emocionantes del fútbol agregó un capítulo más. Lo vivido esta tarde en Goodison Park fue una auténtica locura y marcará el momento en el que Everton se escapó del descenso de la manera más épica.
La preocupación y el desespero se adueñó del pensamiento de todos los hinchas de Everton y también los jugadores. El equipo se encontraba abajo por dos goles y el descenso se veía tan cerca como nunca, pero el segundo tiempo fue lo que todo aficionado ‘toffee’ soñó.
Los goles de Mateta y Ayew habían puesto contra las cuerdas a los dirigidos por Frank Lampard, pero la charla de los 15 minutos de descanso dio resultado. El equipo de Yerry Mina salió a comerse al rival y lo terminó haciendo.
El defensor central Michael Keane puso el primero en la cuenta de los locales e hizo creer a su equipo. Richarlison, a falta de 15 minutos, puso el empate y le dio forma a la ilusión de los de Liverpool, pero faltaba el final más esperado
El gol de Calvert-Lewin para salvar a Everton
Cuando solo restaban cinco minutos por jugarse, Demarai Gray lanzó un centro al área de Crystal Palace con la intención de encontrar una cabeza salvadora. Esa cabeza apareció y como de costumbre fue el goleador Dominic Calvert-Lewin. El ingles puso el (3-2) e hizo delirar a todo Goodison Park, al punto de generar la invasión de los hinchas.
El conjunto de Lampard resistió el final del partido y se llevó los tres puntos. Luego de mucho estrés y miedo general, por fin lograron firmar la permanencia y el equipo de Yerry Mina estará nuevamente en la Premier League la próxima semana. Ahora Leeds y Burnley son los que se disputan la permanencia. Ambos tienen los mimos puntos y solo uno podrá salvarse.