Adrián Barcasnegras
Atlético de Madrid llegó a la semifinal de Supercopa de España como favorito, pero terminó diciendo adiós. Athletic Club de Bilbao se impuso en los minutos finales y para colmo, Atlético de Madrid se quedó con uno menos debido a una patada escandalosa.
La frustración se adueñó de todo Atlético de Madrid cuando en apenas cuatro minutos, los vascos dieron vuelta el encuentro. Solo quedaban nueve minutos de partido y la desesperación aumentaba. La clasificación se iba de las manos y la reacción de los rojiblancos no aparecía en ningún momento del partido.
Aquella desazón se hizo evidente en José María Jiménez, quien en su intento de ganar una pelota en el área rival, pegó una patada descalificadora justo a la cabeza de Íñigo Martínez.
La patada de José María Jiménez a Íñigo Martínez
El juez central se equivocó en primera instancia y decidió solo mostrar tarjeta amarilla. Tras la revisión del VAR, rápidamente notó que era una falta de expulsión clara y lo envió a las duchas. Finalmente el equipo que dirige Marcelino aguantó el resultado ante un Atlético de Madrid inoperante en ataque y se metió en la final de la Supercopa de España.
Los bilbaínos deberán enfrentar en la final a Real Madrid. Aunque el conjunto merengue llega como candidato, Athletic Club de Bilbao se ha acostumbrado a hacer excelentes partidos ante los grandes, tal cual lo hizo hoy en Riad.
Ahora José María Jiménez estará como mínimo dos partidos fuera por sanción. El primero de esos encuentros será ante Real Sociedad por la Copa del Rey y el segundo ante Valencia por LaLiga.